Cómo elegir su ducha o lavaojos de emergencia

A la hora de adquirir una ducha o lavaojos para su negocio es importante valorar qué sistema se adapta mejor a sus necesidades, cumpliendo siempre con la normativa UNE-EN 15154 que establece las características básicas que estos equipos deben de garantizar.

Existen principalmente equipos conectados a la red de agua y equipos autónomos con depósito (tanto de agua como de solución salina u otras soluciones) La elección de uno u otro dependerá del entorno de trabajo, del tipo de actividad que realice (y sus respectivas normas específicas) y del tipo de mantenimiento que pueda realizar. Lo detallaremos en cada producto más adelante.

Además de esto, también es importante tener en cuenta la calidad de los mismos. En muchos casos se opta por instalar productos muy económicos con el fin de cumplir normativa, y esto al final repercute negativamente en su empresa: Malas calidades, problemas en la instalación, rápido deterioro, aguas negras (corrosión galvánica), escasez de repuestos, nulo servicio técnico... Por no hablar del tiempo que consumirá cada nueva incidencia con su equipo y el riesgo de tener un equipo que no trabaje en condiciones óptimas cuando ocurra una emergencia real. Como en muchas otras situaciones, lo barato puede salir caro.

Lavaojos

Los sistemas lavaojos suponen una primera asistencia en caso de que una sustancia o partícula entre en contacto con el ojo. El ojo es un organo extremadamente delicado, y su alteración química o mecánica puede provocar lesiones permanentes que empeoren o anulen la visión del paciente.

Es importante disponer de un sistema lavaojos para responder a la emergencia en los primeros segundos y minimizar en la medida de lo posible el daño causado en el ojo, especialmente clave en accidentes con productos químicos (sobre todo cáusticos), donde cada segundo supone la diferencia entre una leve irritación, una baja prolongada o la pérdida total del ojo.

Existen tres tipos de lavaojos principalmente: las botellas lavaojos, los lavaojos con depósito de agua y los lavaojos conectados a la red de agua

Lavaojos conectados a la red

Son lavaojos fijos, conectados directamente a la red de agua. Proporcionan un flujo constante de agua con un caudal regulado. Requieren de una toma de agua cercana, por lo que suele ser necesario realizar una reforma con instalación de fontanería, teniendo en cuenta también la evacuación del agua sobrante y que haya suficiente presión en el circuito de agua (mínimo 1,5 bar en nuestros dispositivos). Este tipo de equipos han de probarse según normativa una vez a la semana por el personal responsable.

Es muy habitual encontrar estas instalaciones en laboratorios y grandes industrias, al ser equipos de gran suministro y durabilidad. Permiten además múltiples configuraciones, alarmas, sensores y demás accesorios que complementan su funcionalidad dentro del plan de seguridad de la empresa.

Nuestros lavaojos fijos B-Safety se fabrican en acero inoxidable AISI304 y latón. Incorporamos además manguitos oculares de elastómero que cubren los rociadores para proteger los ojos de posibles golpes por pánico en caso de emergencia.

Lavaojos con depósito

En zonas donde no se puede proporcionar una alimentación de agua potable es posible habilitar un lavaojos con depósito autónomo. Al emplear únicamente agua potable, ha de tratarse con un aditivo especial que evite la proliferación de bacterias y otros patógenos. Dicho agua ha de sustituirse cada 6 meses y volver a tratar para cumplir con la normativa UNE 15154-2.

Son una solución sencilla y portátil para necesidades más modestas o para complementar una instalación fija, que además elimina el coste de instalación de un dispositivo conectado a la red de agua. Su mantenimiento es mucho menor que el de equipos fijos (semestral vs semanal), pero a cambio tienen una limitación del caudal al trabajar con depósito (algo a tener en cuenta según el número de trabajadores por ejemplo)

En BotellasLavaojos disponemos de lavaojos B-Safety con depósito presurizable de 16L fabricado en acero inoxidable. Su estructura soporte incorpora un asa y dos ruedas para que sea fácilmente transportable. Un producto resistente y muy duradero.

Botellas lavaojos

Las botellas lavaojos son el sistema más versátil, fácil de instalar, transportar y mantener. Se trata de botellas herméticamente selladas para garantizar su esterilidad, con una solución limpiadora que enjuaga el ojo sin riesgo de contaminación. Al ser un producto estéril, su mantenimiento se limita a controlar su caducidad (3 años en nuestras botellas Plum)

Se adaptan a a cualquier sector y empresa,ya que son fácilmente instalables mediante estaciones murales o portables mediante riñoneras o cualquier otro sistema del cliente. Talleres, carpinterías, metalúrgicas, empresas de limpiezas, mantenimiento, cimentaciones, laboratorios, almacenes, universidades, transportistas, frío industrial, etc. pueden disponer a un coste realmente bajo de un sistema lavaojos práctico y de bajo mantenimiento.

En caso de riesgo químico, las botellas de solución neutralizadora (nuestro pH-Neutral) son la mejor opción posible, ya que cortan el avance de la quemadura química que producen los productos cáusticos (ácidos y bases en general, limpiadores, desengrasantes, disolventes, hormigón, amoníaco en frío industrial, etc.)

Las botellas lavaojos Plum ofrecen el sistema más completo de mercado, con multitud de formatos y estaciones adaptadas a las necesidades de cada empresa. Consulte cuál se adapta más a sus necesidades ( Riesgo químico, partículas, sustancias no cáusticas, entorno sucio o limpio, etc.)

Duchas

Las duchas de emergencia permiten un enjuague completo del cuerpo en caso de accidente. Al tratarse de equipos de alto caudal (entre 35 y 110l/min) la opción habitual es la instalación de una ducha fija conectada a la red de agua, siendo la opción con depósito más interesante solo si no es posible disponer de red de agua o existe riesgo de que esta pueda fallar.

Existe una particularidad que no suele tenerse en cuenta, y es si el equipo va a colorarse en interior o en exterior. Los equipos de exterior deben de garantizar un rendimiento óptimo si existe riesgo de heladas o altas temperaturas en la columna de agua. Instalar equipos de interior en el exterior llevará en la mayor parte de los casos a sufrir graves problemas de funcionamiento o deterioro. El agua de una ducha a pleno sol puede superar fácilmente los 50 grados, mientras que una ducha con el agua congelada no funcionará en caso de accidente.

Duchas conectadas a la red

Son la instalación más habitual. Normalmente incorporan además un sistema lavaojos independiente para aprovechar la conexión. Existen diferentes tipos de montaje: de pedestal, mural, de pared y de techo. Es importante tener clara la zona de instalación (interior/exterior) y los posibles riesgos que esto provoque.

Para exterior disponemos de duchas calefactadas (ATEX) o autovaciantes para evitar riesgos de heladas o exceso de temperatura

Trabajamos únicamente con duchas de gama alta, fabricadas en acero inoxidable AISI304 con válvulas en acero inoxidable de alto grado AISI316. Nuestras duchas B-Safety poseen unos acabados, una durabilidad y una tecnología superiores a la media, que garantizan a nuestros clientes un mantenimiento reducido y unas prestaciones profesionales.

Duchas con depósito autónomo

deposito-bsafety.jpg

Las duchas con depósito son la única alternativa posible en situaciones donde no existe red de agua o esta pueda verse comprometida en caso de accidente: industria petroquímica, plantas exteriores con grandes superficies, obras que requieren instalaciones temporales, etc.

Poseen grandes depósitos para garantizar un caudal adecuado durante el mayor tiempo posible. Su funcionamiento suele ser por gravedad en las duchas más grandes y presurizadas en las más pequeñas, controlando el flujo mediante un regulador del caudal.

Este tipo de duchas suelen requerir de una configuración muy personalizada para adaptarse tanto a las necesidades del cliente (sistemas de alarma, señalización...) como al propio entorno (depósito calefactado, cabina cerrada, sistema de refrigeración...)

Existen alternativas desde 240 litros (tipo remolque) hasta 2000 litros. Al tratarse de depósitos con agua estancada, requerirán sustituir y tratar el agua semestralmente para garantizar el correcto estado de la misma y cumplir con la normativa vigente.